martes, 11 de junio de 2013

209


Culpables, hicieron caer el colchón en el suelo. Ahí permaneció durante los meses siguientes. A través de la ventana la lluvia Into.my.arms con la distancia amenazante en los aviones. En ese piso cupo el amor hacia lo mismo y el baile bello de los cuerpos. Cupieron toda la franqueza y los preludios más nobles. Luego se transformó en barca sin puentes en los que proyectarse y llamarse, silenciosos. La mirada de él la llenaba en plena niebla. Invitarse a entrar y cruzar la puerta era entregarse con espejos en la mano. El pasado no cabía en ese piso. El futuro intentó colarse: no se pudo hospedar.

No hay comentarios: